Empezamos el día curioseando en una mini vivienda de un joven muy ocupado que se acercó a Boq Architekti para pedir que rediseñaran su compacto apartamento de Praga para convertirlo el lugar perfecto cuando está en la ciudad.
El piso de 36 metros cuadrados se había dividido recientemente en dos salas separadas y por eso en la nueva reforma no hubo que derribar todo, sino que el rediseño del apartamento como "guarida" se hizo a partir de la división ya existente.